Con el objetivo conocer la vida y obra de Emil Cioran, pensador de origen rumano, en tres sedes de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, se lleva a cabo la primera edición del Encuentro Internacional Cioran en México. Entre filosofía y literatura, organizado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad Autónoma de Zacatecas, con el apoyo de la Embajada de Rumanía en México.

El evento contará con la participación de especialistas en su acervo procedentes de Rumanía, México, Estados Unidos, Argentina, Colombia, Alemania y Portugal.

El Salón de Congresos de la Unidad de Investigación Multidisciplinaria (UIM II), el Doctor Alejandro Byrd Orozco, Secretario de Extensión Universitaria y Vinculación Institucional de nuestra Facultad, fue el encargado de realizar el acto inaugural y estuvo acompañado por el señor Ionuț-Maria Vâlcu, encargado de negocios de la Embajada de Rumanía en México, Nelson Guzmán, representante del estado de Zacatecas y los maestros Marco Antonio Jiménez García y Ana María Valle, organizadores del evento.

Ionuț-Maria Vâlcu, agradeció a la Facultad y al Doctor Manuel Martínez Justo por abrir las puertas a su país para que se conozca más de ella, y qué mejor por medio de este tipo de eventos y de uno de los hombres de la escritura más importante de su país y quien es considerado un baluarte del siglo XX en la cultura no nada más de Europa, sino de Latinoamérica.

La primera Conferencia la impartió el escritor Ciprian Valcan, autor del libro Cioran, un aventurero inmóvil. Treinta entrevistas, dijo que Cioran cambió la vida y perspectiva de muchas personas que lo leyeron, además del desapego que marcó su vida, decidió cambiar su lengua madre por el francés. Incluso, agregó, cuando Stalin murió y Rumania se vio libre de la ocupación soviética, su único sentimiento fue el de pesadumbre.

Por su parte, el profesor Daniel Gerber hizo su ponencia con Cioran o el odio del ser, la cual partió desde unas similitudes entre el rumano y Sigmund Freud donde encontró algunos puntos de convergencia no obstante que Cioran no simpatizara con el psicoanálisis pero la tenía en otras dimensiones; habló de la manera en que tomaba el tema de la insatisfacción del ser humano y existencia de la muerte que constituye un imperativo de un goce que lleva a la destrucción del yo mismo y su insistencia en muchos de sus escritos.

A su vez el maestro Alejandro Payá, platicó sobre Cioran, notas sobre locura, suicidio y muerte; quien puso al filósofo en el ramo que calificaba el escritor Manuel Arranz quien dice que: “hay autores a los que se puede leer pero no se puede escribir sobre ello por todas las refutaciones que se pueden encontrar” y el rumano es uno de ellos y su forma de escribir así lo es y que a pesar de ser a veces muy obscuro siempre reconfortaba el seguir cada palabra, enunciado y frase que ponía en los textos

Finalmente el Doctor Marco Antonio Jiménez cerró el primer día de actividades con Cioran, la vida un instante, y quien comenzó su plática con la frase de José Alfredo Jiménez: “No vale nada la vida, la vida no vale nada. Comienza siempre llorando y así, llorando, se acaba; por eso es que en este mundo la vida no vale nada” para hacer alusión al texto que leyó sobre el rumano al cual consideró una experiencia explosiva pero depresivo y pesimista y ponía al descubierto a una perversa conciencia que dejaba más preguntas que respuestas al pensamiento.