Durante su participación en la XV Semana Académica de Ciencias Políticas y Administración Pública, celebrada en el Auditorio II Miguel de la Torre, de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, Álvaro Delgado Gómez, periodista de la revista Proceso, aseguró que la impunidad ahoga al país.

Al ahondar en ese asunto, señaló que el drama que se vive en el país es consecuencia de la corrupción que a todos incomoda. Impunidad de los políticos que roban al erario público y pocas veces son sometidos a juicio.

Con 30 años dedicados al periodismo, el egresado de la entonces ENEP Acatlán, refirió que entonces como ahora, el panorama de los medios de comunicación es desalentador por la falta de independencia y la subordinación a intereses privados de los propietarios de empresas periodísticas, entre otras razones.

“La crítica auténtica en el país es escasa, se elogia y ocultan muchas cosas. El periodismo en México es terriblemente corrupto. Los periodistas deben informar con rigor”, aseveró el ganador del Premio Nacional de Periodismo 2003.

A los jóvenes presentes en la conferencia les dijo, “no gastan en comprar una revista o periódico. Todos están en sus teléfonos”, sin embargo, lo que ahí encuentran es parcialmente cierto y apartan lo importante de lo fundamental.

Por su parte, Rubén Torres Jiménez, reportero de El Economista, fue directo al mencionar que se debe ser crítico desde la época estudiantil; él participó en algunos movimientos sociales y colaboró con los escritores Eduardo Galeano y Mario Benedetti; con el periodista Miguel Ángel Granados Chapa, de quien aprendió la técnica del reporteo.

“Yo primero aprendí la técnica, después entré a estudiar” en la escuela Carlos Septién. A continuación señaló que en México no hay medios independientes.

“El Economista vive de la publicidad privada, de bancos, etcétera. En ocasiones llega la publicidad oficial y sencillamente no aparece, porque no interesa”, aseguró.

Después de citar al periodista Ryszard Kapuściński, expresó que ser veraz significa estar lo más apegado a la verdad. Agregó que al momento de trabajar, los periodistas deben poner en juego cinco sentidos: estar, ver, oír, compartir y pensar.

Otras obligaciones del periodista son considerar el motivo, es decir, la intención del texto; el sustento, las fuentes y argumento, quién lo dice. La argumentación por vía lógica, convence y por vía psicológica provoca emoción en los lectores.

La mesa de análisis estubo moderada por la licenciada Carina Galar Martínez, de la FES Acatlán, quien subrayó que los ciudadanos no informados en los medios de comunicación difícilmente pueden formularse juicios. Al igual que debe revalorarse el papel de la prensa dentro de la democracia, que a su vez integra el sistema político del país.