En la 11ª Feria de la Sexualidad. Placeres sí, responsabilidad también, realizada en el Auditorio Miguel de la Torre de la Facultad de Estudios Superiores, se presentó la obra Las estrellas del México Burlesque Festival, espectáculo de luces con ocho representaciones musicales de diversa índole.
Así, en Todos los cuerpos, todas las historias, la conductora Tencha Lamas presentó los números musicales, y apareció La Velentina entre los asientos ocupados por el público haciéndolos partícipes. En uno de los extremos, sus compañeros que esperaban turno, alentaron al danzarín con silbidos y aplausos hasta que el estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras en Ciudad Universitaria se despojó de vistoso calzón anaranjado.
Luego apareció la Baronesa Roja, quien elevó el entusiasmo, pues el egresado de periodismo del Tecnológico de Monterrey irrumpió con una máscara de luchadora negra, capa y el resto del atuendo del mismo color. Con sus evoluciones se despojó de botines, rodilleras y blusa hasta quedar en calzoncillos frente al público.
Después de cada número, Chava, cómico jala-aplausos, vestido de mezclilla y comparsa de la maestra de ceremonias, se afanó en recoger las prendas de sus compañeres, señalando que el espectáculo tipo burlesque honra las memorias de Lyn May, Wanda Seux y otras diosas que dominaron el México nocturno de antaño.
De punta en negro, Sophie Lotta Love, estilista y actriz, basó su número musical con cajas y bolsas recicladas de donde extrajo otras piezas para cambiar su atuendo. Desde el Cono sur, Chile específicamente, Lilth Owls también bailó con atavío completamente negro despojándose de las prendas hasta quedar sin sujetador y en diminuta tanga.
A manera de intermedio, entre aplausos, el afanador de mezclilla también se desnudó, impulsado por Tencha Lamas para presentar a continuación a Spicy Magnolia, egresado de Derecho en la UNAM, con tres cambios de diferente música mudó el vestido de novia, velo y ramos blancos terminado en corpiño color champagne.
Desde Tijuana, Katherine Spears salió enfundada en traje gatuno, después de hacer bailar a los asistentes y encaramarse en la barrera de madera que separa la parte alta y baja del auditorio, se dirigió al escenario sobre botas negras de largos tacones de aguja. Con traje oscuro y camisa a rayas blancas y azules, desde Guanatos (Guadalajara), Vanilla Snake se desprendió de largos guantes y al final lució diminuto calzoncillo negro sostenido por cadenas. Por último, Xanath hizo honores a la mexicanidad con su indumentaria muy revolucionaria de enormes enaguas, rojo rebozo, cananas y rifle.
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