El autor Diego Martínez Cara y la ilustradora Fernanda Vizcarra unieron talentos plasmados en el libro Anduriñas, cuya presentación se realizó en el Auditorio Miguel de la Torre de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, obra que contiene un cuento de fantasía donde dos niños desempeñan la parte central de la historia que se desarrolla en un bosque, en donde se encuentra un puente de piedra.
Anduriñas, que significa golondrinas, es obra de Corda ediciones, con el que inicia la colección Palabras al viento, es un cuento de 48 páginas impresas en papel cromacote couché, con tiraje inicial de 550 ejemplares que aumentarán para las entregas en las bibliotecas, librerías y para su distribución en Amazon.
La ilustradora, Fera Vizcarra, con un destacado desempeño en doblaje y maquillaje artístico, señaló que la obra, “es un cuento mágico, de fantasía, más grande que sus páginas y su texto. Tiene simbología y más significado de lo que está en palabras”.
Partidaria de la animación y otros frentes del arte, Fera Vizcarra citó al ilustrador británico Tom Moore, de quien mencionó “no debemos limitarnos por las leyes de la física, usar los fondos, las perspectivas y las formas como un lenguaje más para contar parte de la historia que el texto no te dice. Tú puedes usar colores y los diferentes lenguajes para contar este mundo misterioso que Diego está queriendo plantearnos”.
Para Martínez Cara, “este libro habla de huellas y tesoros ocultos, de cómo la magia sobrevive en pequeñas grietas y rincones. Cuando uno sabe observar, estas mismas huellas nos gritan por contar su historia. Estos tesoros pueden tomar diferentes formas, a veces son personas, momentos, objetos, lugares; puede ser un río que te cuente una historia, incluso, un rostro que encuentras en un viejo tronco”.
Frente al público universitario asistente y acompañado de la doctora Rocío García Rey, catedrática de la FES Acatlán, y el crítico literario Francisco Vásquez Ponce, el autor destacó: “para mí la fantasía, la narrativa fantástica cuando llega a su mejor punto logra desdibujar estas orillas entre realidad y ficción y nos invita a viajar, volver a nuestras miradas de niños y ver el mundo con magia y encontrar más de estos tesoros. Esos tesoros son uno de los personajes fundamentales del libro, más allá de los dos niños que guían la historia, el puente, el río, las golondrinas”.
Entrevistado al concluir la presentación, Martínez Cara dijo: “es el primer libro que publico, el primer cuento. Con la misma ilustradora Fera Vizcarra ya he estado trabajando una novela gráfica y otros cuentos. La novela gráfica sigue un poco en el borrador, tal vez para el próximo año. Ya tengo un par de cuentos acabados, los procesos editoriales llevan su tiempo”.
Desde la perspectiva de editor, estimó que “en la pospandemia está resurgiendo la industria editorial, espero que a finales de este año o el siguiente salga un nuevo tomo. Del mismo corte: fantástico, con un tono un poco más oscuro, una lectura más adulta. Una vuelta al cuento clásico”.
Por último, el autor destacó la importancia del cuento: “la fantasía es la ilustración, de hecho, los hermanos Grimm, los reconocidos son dos, tenían un tercer hermano, Ludwig, que hacía los grabados. En la literatura infantil, a pesar de la importancia de las ilustraciones se ha dejado un poco de lado a los ilustradores. Me parece importante rescatar la figura del ilustrador y darle su lugar como coautor de la historia”.
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