• A pesar de los avances sobre la perspectiva de género en las leyes mexicanas, especialista dice que aún falta mucho por trabajar

Mientras que el 37 por ciento de las mujeres encontradas culpables de un delito se les condena a más de 20 años de cárcel, al 50 por ciento de los hombres les dan una pena menor a 10 años, se debe a que aún existen muchas diferencias sobre la procuración e impartición de justicia, entre las que destaca, el desconocimiento de los derechos humanos por parte de las autoridades para aplicar de forma correcta esta perspectiva de género a las mujeres que han sido violentadas o han sido víctimas en la comisión de un delito, señaló la doctora Lizbeth Xóchitl Padilla Sanabria, académica de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.

Para la doctora Padilla Sanabria, “el trato con perspectiva de género en las mujeres que han cometido delitos, creo que aún no se aplica de forma correcta, la parte de víctima sí, pero la parte ya como imputada no se hace de forma adecuada y se siguen tratando como si fuera un hombre, eso se debe muchas veces a la ignorancia de las autoridades que por omisión o por otras causas no toman en cuenta lo que ya se establece como ley. Además de que si le juntas las circunstancias económicas, sociales, sentimentales y tradiciones que se vienen arrastrando esto afecta, pero si vamos avanzado para tener una impartición de justicia justa y pareja en las mujeres”, destacó.

La también posdoctora en Derecho agregó que, si bien es cierto el crecimiento en los penales femeninos, esto se debe a que ahora las mujeres por su situación de no depender de hombres, al ser las que mantienen hijos, casa y trabajo buscan alternativas para obtener dinero y aquí es donde se aprovechan para utilizarlas en actos ilícitos, muchas veces por engaño.

“Uno de ellos es el modo sentimental, muchas de ellas por enamoramiento son usadas por las supuestas parejas quienes una vez que ganaron su confianza las enredan en casos de tráfico de drogas o en otros delitos donde  ellas mismas por omisión, por quedar bien con la pareja, dejan que pasen abusos y maltratos infantiles, por ejemplo, y  pasan de cómplices a acusadas, aquí es donde ellas al no poder acceder a un defensor privado, sin apoyo, son dejadas a la deriva, súmale que muchas no saben que al ser señaladas por cometer un acto ilícito deben de ser tratadas desde la perspectiva de género, algo que ya se tiene materializado en la Ley Federal para la Protección de una Vida Libre sin Violencia, sin embargo, repito, no ha habido la capacitación suficiente”.

La también catedrática del Posgrado en Derecho y en Política Criminal en Acatlán, señaló que otras causas que originan estas injusticias jurídicas en las mujeres es porque “seguimos inmersos en una sociedad machista y no desde el punto de vista masculino, sino también femenino, en una cuestión económica, de educación y creencias que existe entre mujeres muy arraigadas, afortunadamente las nuevas generaciones vienen con otro chip, por ahí puede ser un gran avance que evidentemente se tiene que ver reflejado en futuros eventos donde existan sentencias en ellas y es que a la mujer se le sigue viendo como la mamá, la que se enoja porque tiene periodos, por sufrida y muchos estereotipos que siguen teniendo”, comentó.

Padilla Sanabria ejemplificó que, incluso, en días pasados la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió una sentencia donde condena al Estado mexicano por el caso de Digna Ochoa, donde en uno de los puntos determina que toda investigación y toda sentencia en donde exista una mujer involucrada se debe realizar con perspectiva de género.