“El consentimiento informado es toda la conformidad expresa de una persona manifestada por escrito para la realización de un diagnóstico o tratamiento de la salud, pero desafortunadamente debido a las tradiciones y el mal manejo que se tiene en el sector salud, en especial en las citas médicas, donde el trato del médico y paciente es nulo, suceden episodios que en algunos casos tienen consecuencias fatales, debido a la falta de conocimiento e información”, señaló la maestra Mariana González Zamora, catedrática de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.
Al impartir la conferencia El consentimiento informado (obligaciones y derechos) y La importancia de la voluntad anticipada en la Fiesta de las Ciencias y Humanidades 2023, realizada en Universum, en Ciudad Universitaria, la ponente tuvo como objetivo dar un panorama sobre el desconocimiento legal que se tiene sobre un derecho humano fundamental como lo es la salud y, por otro lado, sobre la decisión de un tema que sigue siendo polémico pero necesario en nuestros tiempos como es el “bien morir”.
Agregó que el objetivo principal es “garantizar que el paciente conozca la información de primera mano, bien explicada, y una vez garantizada la comprensión de la información a través de los medios y apoyos necesarios, el paciente tiene el derecho de aceptarlos o rechazarlos”.
La abogada destacó que es necesario continuar, acelerar y modernizar las guías para elaborar documentos y, a su vez, una profesionalización para los trabajadores del sector salud, llámese doctor, enfermeras, trabajadores sociales, “por eso es importante que se empiece en el plano académico para prepararlos a saber dar la información sobre la salud del paciente y más cuando esta no sea agradable para poder gestionar la incertidumbre. El paciente tiene derecho a la información necesaria para tomar sus decisiones y debe entender claramente cuál es el propósito de todo examen o tratamiento con sus consecuencias”, señaló.
En la charla Importancia de la voluntad anticipada, destacó que, si bien existen estados de la República que ya lo aplican conforme a derecho, en el resto del país no pueden legislar por las tradiciones, la religión y, sobre todo, por las barreras que muchas veces ponen las familias. “Es necesario que se tengan en cuenta los conceptos relevantes para dar a conocer la importancia de la voluntad anticipada como son vida digna, cuidados paliativos y autonomía de la voluntad que son importantes cuando la persona, en caso de que lo pida, se le cumpla esa voluntad”.
Destacó que hablar de la muerte sigue teniendo dos vertientes, la primera y la más importante, el miedo a hablar de ella, pero “en caso contrario, cuando la celebramos cada noviembre, donde hacemos una fiesta, nuestro lenguaje para hablar de la muerte se ha empobrecido, no nos atrevemos a usar palabras para nombrarla y utilizamos frases como ‘la perdemos’, ‘se nos va’, entre otras, entonces, si podemos lograr ese equilibrio estaremos avanzando en ese proceso”, destacó.
Entre las acciones para actuar ante la muerte, González Zamora señaló la de “tomarlo como objeto de reflexión, a enseñarle a los niños que forma parte de la vida, preguntarnos qué nos toca hacer para que nuestros seres queridos mueran mejor, y la más importante, como no hay garantía de poder expresar esa voluntad cuando se necesite, debe dejarla por anticipado para que otros tomen decisiones en su lugar y mientras no se presente no queda más que proporcionarle al individuo mejores condiciones físicas, psicológicas, sociales y espirituales”, finalizó.
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