Cine Adictos

Donde la moral y el revólver son uno

POR  CARLOS DÍAZ ROMERO

“En el desierto las cosas encuentran la manera de sobrevivir”.
The X-Files
Albert Hosteen

Western 1Existen pocas imágenes tan memorables y profundamente impresas en el imaginario cinematográfico como la del duelo entre gatilleros del viejo oeste; y aunque el escenario de estas historias era el suroeste de Estados Unidos, fue gracias a Italia que el western ganó vitalidad y se filtró en la cultura mundial.

Cuando las historias de heroicos vaqueros y comisarios pulcros llegaban a su ocaso en Estados Unidos a finales de la década del 50, el director italiano Sergio Leone se alzó de entre las arenas del desierto con una visión oscura y amoral del oeste: el spaghetti western. En filmes como “A Fistful of Dollars” (1964), “For a Few Dollars More” (1965) y la legendaria “The Good”, “The Bad and The Ugly” (1968), conocidas como La Trilogía del Dólar, Leone dio vida a una nueva clase de héroe: el ambiguo y a veces egoísta forajido, motivado no por el honor o la justicia sino por la vendetta e incluso el dinero, pero a fin de cuentas benigno.

El antihéroe del desierto había nacido, pero su nacimiento, como la fama que le acompañaría hasta el final, no estuvo libre de tropiezos con la ley. Sergio Leone llevó la inspiración al nivel del plagio: la trama de “A Fistful of Dollars” es un calco tan evidente de Yojimbo (1961), de Akira Kurosawa, que el director japonés escribió en una carta a Leone apenas terminó de ver la cinta: “Es una buena película, pero es mi película”.

Luego de un acuerdo fuera de los tribunales entre los directores, Leone continuó labrando su obra, gracias a la cual vieron nueva vida en sus carreras actores en relativa decadencia como Henry Fonda, e incluso el ascenso al estrellato nombres como el inconfundible Clint Eastwood quien, con sus actuaciones, codificó al gatillero silencioso, brusco y excéntrico, con un sentido poco ortodoxo de justicia.

Películas posteriores del director, como “Once Upon a Time in the West” (1968), protagonizada por Charles Bronson, cimentaron la figura del misterioso y anónimo vengador, utilizada por otros cineastas italianos hasta bien entrada la década de los años 70.

El spaghetti western dejó su marca en el mundo de la música. El compositor italiano Ennio Morricone le dio un sonido único al viejo oeste; con silbidos, armónicas y guitarras, impregnó a las cintas de una personalidad inigualable. Su huella es tan duradera que la banda californiana Metallica (thrash metal), utiliza la pieza Ecstasy of Gold para iniciar sus conciertos; incluso, quien jamás ha visto la cinta puede reconocer y silbar el tema de The Good, The Bad and The Ugly apenas lo escucha.

Western 2

Pero el ocaso para el western tendría que llegar tarde o temprano. Al igual que el spaghetti vino a deconstruir el moribundo género del viejo oeste, películas como “My Name is Nobody” (1973), si bien exitosas, comenzaron a tener una ambientación más relajada que desmitificó el aura de cintas previas y poco a poco se convirtieron en autoparodias.

Cuando la venganza, la amoralidad y la cacería de recompensas se volvieron cliché, tuvo que llevarse a cabo una nueva deconstrucción, que vendría a poner el último clavo en el ataúd del western, con el honor y respeto que merecía.

En 1992, Clint Eastwood produjo, dirigió y protagonizó Unforgiven, cinta sobre un exforajido que, ya viejo, busca pasar sus últimos días en paz; pero el destino y la necesidad lo arrastran de vuelta al mundo de la muerte a cambio de dinero. Este filme desviste de romanticismo a la venganza, y muestra las consecuencias devastadoras que puede traerle al vengador seguir el camino del plomo y la sangre.

Al final, el cazarrecompensas sólo es el instrumento de la represalia, es su única función y existe atrapado en un ciclo de violencia, consumido por el odio y la pérdida, hasta que la violencia misma le haga pagar sus crímenes.

Ahora, luego de su caída como género, el spaghetti western es homenajeado por directores nostálgicos como Quentin Tarantino con “Django Unchained” (2012), cinta donde el realizador se parodia a sí mismo, y “The Hateful Eight” (2015), en la que Tarantino finalmente pudo colaborar con su admirado Ennio Morricone. También hay ejemplos de homenajes en cintas animadas visualmente imponentes como “Rango” (2011) de Gore Verbinski.

Gracias a estos tributos, la mítica figura del llanero aún es visible como una majestuosa silueta mientras cabalga hacia el horizonte, extendiendo su trágica y estoica sombra hasta nuestros días.

Esta colaboración se publicó en la edición 153 del boletín informativo CINEADICTOS. Abril de 2016. Coordinación de Difusión Cultural de la FES Acatlán.

 

Categoría(s): Sin categoría

Bienvenida

CineAdictos, publicación periódica de la Coordinación de Difusión Cultural, nació en noviembre de 2000. Incluye reseñas de películas, trayectorias de actores, directores, críticas, comentarios sobre los principales festivales, entrevistas, avances técnicos y aspectos de los distintos géneros cinematográficos. El material impreso se distribuye entre la comunidad de la FES Acatlán; a partir del semestre 2015-II extiende sus alcances con el blog de CineAdictos. Espacio abierto a los interesados en la divulgación del séptimo arte.

Calendario de Publicaciones

mayo 2016
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031  

Categorías

Hecho en México, todos los derechos reservados 2024. Esta página puede ser reproducida con fines no lucrativos, siempre y cuando no se mutile, se cite la fuente completa y su dirección electrónica. De otra forma, requiere permiso previo por escrito de la institución.

El contenido aquí expuesto no necesariamente refleja la opinión de la institución, y es responsabilidad exclusiva del administrador del blog.