#Historias50
“Cuando nos presentamos, yo siempre digo que soy de Acatlán”, afirma con orgullo Raúl L. Parra, mientras recuerda los días universitarios en la FES Acatlán. Aunque ahora vive al otro lado del mundo, en Beijing, China, su corazón sigue arraigado en nuestro campus, que considera como la segunda casa. Ahí, en las aulas de la Licenciatura en Comunicación, forjó amistades entrañables, cimentó la vocación e integró la primera generación que egresó bajo el nuevo plan de estudios.
Raúl es ejemplo vivo de lo que significa llevar el espíritu universitario más allá de las fronteras. Actualmente es coordinador de Comunicación y Vinculación en el Centro de Estudios Mexicanos UNAM-China, ubicado en la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing, entre los objetivos está tender puentes culturales y académicos entre ambos países.
La jornada del egresado de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán comienza cuando en México apenas termina el día: responde correos, revisa noticias, da clases de español y periodismo, cobertura de eventos académicos y, además, edita el boletín En el Ombligo de la Luna, publicación bilingüe que difunde el trabajo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en Asia.
Maestro en Comunicación por la UNAM, la historia que llevó a Raúl al Lejano Oriente comenzó con una oportunidad. Llegó a China para colaborar en la Radio Internacional, donde producía contenidos digitales para el público hispanohablante.
En dicho trabajo supo que su alma mater abriría oficina en Beijing. Sin dudarlo, propuso la cobertura del acto para la radio. Lo hizo con la emoción del egresado que reconoce los momentos históricos… y ese reportaje terminó por abrir las puertas del Centro de Estudios Mexicanos.
Desde 2012, Raúl L. Parra forma parte del equipo de la UNAM-China, institución única en el continente asiático que representa a la Universidad de la Nación, a todo México. “El trabajo aquí es mucho, pero también las ganas de seguir aprendiendo me motivan a continuar”, asegura. Más allá de las responsabilidades profesionales, reconoce que la cotidiana labor es la forma de honrar a su madre, quien le inculcó la importancia de la educación.
Con experiencia como editor y articulista en medios como la Revista Mexicana de Comunicación y el periódico Reforma, Parra piensa extender la estancia en Asia, impulsado por el potencial en innovación, tecnología y cultura.
Por ello, anima a los universitarios a considerar experiencias de movilidad en esta región del mundo. Vivir en China, asegura, cambia la forma de ver el mundo y permite el entendimiento directo de otras realidades, sin filtros occidentales.
Raúl L. Parra representa a la UNAM en China, el poder transformador de la educación, la fuerza de las raíces universitarias y la convicción de que, con trabajo y pasión, es posible construir puentes culturales e idiomas. En cada paso del acontecer en Beijing escucha firme y claro: “Soy de Acatlán”.
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