Al dar la bienvenida a la XVII Semana Académica de Matemáticas Aplicadas y Computación (MAC), el director de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, Doctor Manuel Martínez Justo expresó sentirse orgulloso de esta licenciatura, una de las que nos da identidad como Facultad y pone a la vanguardia para convertirnos en una institución del siglo XXI. “A 36 años de su nacimiento, MAC ya no es la carrera del futuro, sino del presente”, acotó.
El licenciado Olaf León Páez, presidente de la Sociedad de Exalumnos de la Licenciatura en Matemáticas Aplicadas y Computación, A.C. (SELMAC) invitó a los alumnos a exaltar su identidad acatleca, así como fortalecer la esencia de la Universidad. Felicitó la labor de los profesores fundadores y explicó que a través de la Sociedad fortalecen el vínculo entre egresados y alumnos.
“Somos una carrera única en el mundo y nuestra competencia es con nosotros mismos”, dijo la actuaría Luz María Lavín Alanís, jefa de la División de Matemáticas e Ingeniería, y agregó que uno de los objetivos de la Semana es capacitar a la comunidad en temas específicos mediante 24 conferencias, una mesa redonda, torneos y distintos concursos, uno de ellos inédito en nuestro campus: Programación en videojuegos.
También estuvieron presentes en la inauguración la maestra Nora Goris Mayans, secretaria General Académica; el licenciado José Rodrigo Zenteno Gaeta, secretario de Estudios Profesionales y el licenciado Christian Carlos Delgado Elizondo, coordinador del Programa de Matemáticas Aplicadas y Computación.
La primera conferencia magistral estuvo a cargo del egresado y profesor de la FES Acatlán, maestro José Gustavo Fuentes Cabrera, donde dio un panorama acerca de las tecnologías disruptivas en México, las cuales serían parte de la cuarta revolución tecnológica de la humanidad. Herramientas que abarcan la Inteligencia artificial, el IoT (Internet de las cosas), el Big data, la Impresión 3D, la robótica y la Computación Cuántica.
También habló sobre los dilemas éticos a los que se enfrentan con la incursión de estas tecnologías, uno de ellos es la sustitución de personas por robots en tareas sistemáticas, lo cual desaparecerá millones de empleos y creará otros que necesitarán de una gran cualificación que no todos tienen.
Reflexionó frente a los universitarios sobre dicho reto para las generaciones futuras de profesionistas que deben prepararse constantemente, sobre todo en un país donde la desigualdad es enorme y sólo unos pocos pueden acceder a la educación superior.