• Algunas han provocado filtraciones del agua de la Presa Madín
Los microsismos que han sacudido Naucalpan no pueden considerarse hechos aislados ni fortuitos: obedecen a un entramado de fallas geológicas que cruzan en distintas direcciones y que, en sus intersecciones, generan movimientos telúricos constantes. De acuerdo con especialistas, estas fracturas se evidencian en la superficie a través de ríos, barrancas y hundimientos, sobre todo en colonias como Praderas de San Mateo, donde confluyen hasta tres sistemas diferentes de fallas.
Durante la conferencia LosMicrosismos en Praderas San Mateo Naucalpan, Estado de México, el ingeniero Carlos Arce León, docente de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, consideró necesario evaluar las condiciones estructurales de algunas viviendas de la zona, pues en colonias como Loma Colorada, El Molinito y Río Hondo predominan construcciones autogestionadas, sin cálculos de diseño ni cimentación adecuados, lo que las hace más vulnerables frente a esos fenómenos.
El especialista alertó que, aunque Protección Civil cuenta con manuales de construcción, en la práctica las recomendaciones suelen ser ignoradas. Además, por motivos económicos, algunos vecinos utilizan materiales de baja calidad, lo que hace que, incluso con microsismos de intensidad mínima, las casas estén en peligro de sufrir daños estructurales.
En el encuentro, como parte del ciclo de conferencias Sismos Septiembre, en la Unidad de Investigación Multidisciplinaria II de la FES Acatlán, la maestra Reyna Irina Castro Guadarrama presentó estudios recientes que detallan cómo las fallas que atraviesan Naucalpan se extienden desde la Presa Madín hasta Praderas de San Mateo.
Precisó que los sismos no se alinean únicamente en un sistema este-oeste, también en fallas con orientación noroeste-sureste y otras que cruzan hacia el sur. Esta diversidad de direcciones confirma que el origen de los microsismos está en las intersecciones de múltiples sistemas geológicos activos.
La especialista, egresada del Instituto Politécnico Nacional y docente de nuestra Facultad, explicó que la acumulación de agua por lluvias y filtraciones provenientes de la presa incide en la reactivación de dichas fallas, lo que genera los constantes movimientos de baja magnitud en el área, e incluso mostró imágenes en las que se aprecian fugas del embalse de la presa, provocadas por las fracturas del suelo.
En este contexto, las zonas “encerradas” por los distintos sistemas de fracturas se vuelven especialmente sensibles a los temblores, patrón que ya ha sido documentado con círculos de microsismos que aparecen alineados en distintos puntos del municipio.
El doctor José María Chávez Aguirre, geólogo formado en la Universidad de París, detalló que buena parte de Naucalpan está asentada sobre la llamada Formación Tarango, caracterizada por materiales blandos y poco resistentes. Precisamente allí se localiza Praderas de San Mateo, la colonia más afectada por los microsismos. En contraste, la otra parte del municipio pertenece a la Sierra de las Cruces, con suelos volcánicos mucho más firmes.
El especialista añadió que esta misma formación blanda se extiende hacia Mixcoac, Chapultepec y hasta municipios como Texcoco e Ixtapaluca, en las inmediaciones del Cerro Telapón. Esto revela que el problema no es exclusivo de Naucalpan, sino parte del contexto geológico más amplio que obliga a reforzar la prevención y la planificación urbana en varias zonas del Valle de México.
Hecho en México, todos los derechos reservados 2025. Esta página
puede ser reproducida con fines no lucrativos, siempre y cuando no se mutile, se cite la fuente
completa y su dirección electrónica. De otra forma, requiere permiso previo por escrito de la
institución.
El contenido aquí expuesto no necesariamente refleja la opinión de la institución, y es
responsabilidad exclusiva del administrador del blog.