• Inicia el 1er Congreso Latinoamericano de Recursos Hídricos y Cuencas
La realización del 1er Congreso Latinoamericano de Recursos Hídricos y Cuencas “pone de manifiesto el compromiso institucional” de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) “que fiel a su espíritu humanista y científico, ofrece este espacio de diálogo para que desde la academia se propongan soluciones viables para contener y revertir la crisis hídrica que actualmente padecemos”, aseveró en la inauguración del mismo la Directora de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, Maestra Nora Goris Mayans.
“Es un esfuerzo interinstitucional para reflexionar, debatir y hablar sobre un tema que cobró relevancia al ser integrado en los objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), donde se expresa la urgencia de buscar mecanismos para garantizar la disponibilidad del agua y su gestión sostenible en todo el mundo”, aseguró en el Centro de Estudios Municipales y Metropolitanos (CEMM).
La necesidad del recurso hídrico, aunado a diversos factores modernos, “nos han enfrentado a una realidad incierta en cuanto al abasto de este líquido vital a nivel mundial, y particularmente a México” el cual ocupa el lugar 26 de países con mayor estrés hídrico. “Los datos que tenemos hoy lo confirman con crudeza”, denotó la funcionaria.
En el país, “uno de cada tres hogares no recibe agua diariamente, la agricultura consume el 70 por ciento del agua en el país, casi el 50 por ciento del agua potable se pierde en fugas por falta de mantenimiento en las redes, y el 60 por ciento de los cuerpos de agua en México presentan algún grado de contaminación”, compartió según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El doctor José María Chávez Aguirre, coordinador académico el Congreso, señaló que “la inquietud” del panorama lo condujo a él y a un grupo de colegas de la Facultad “a darnos cuenta de la gravedad del deterioro al que estaba sometida” la región del Valle de México, “parte de ella reconocida por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 2016 como la región más contaminada del mundo”.
Esta preocupación los llevó “a esudiarla para tratar de entender lo que se había hecho y cómo remediarlo desde un enfoque multidisciplinario, pilar invaluable de nuestra Facultad”. De esta manera, “surgió la propuesta de exponer inquietudes, ideas, trabajos y proyectos en una reunión que concretara a todos”.
El ponente enfatizó que “el espíritu de solución radica en los jóvenes, materia prima de las universidades, en cuyos valores y espíritu está dar respuesta y atender las necesidades sociales, bajo una visión crítica que nos permita propagar el conocimiento”.
Por otra parte, indicó que la responsabilidad “de plantear los escenarios a las diversas problemáticas del mundo”, así como “analizarlos, plantear soluciones y compartir estas inquietudes con nuestra comunidad”, recae en los docentes, académicos e investigadores.
“Si bien nos encontramos ante una problemática que se encuentra en un punto desbordante, espacios como este nos permiten plantear escenarios más positivos a través del diálogo, la toma de acuerdos y el compartir conocimiento”, subrayó Chávez Aguirre.
“El objetivo de este Congreso no es una ilusión, una fantasía o un sueño inalcanzable, es algo real”, remarcó, “es esforzarnos por lograr que nuestra barca salga de las aguas sucias y turbulentas para navegar en aguas transparentes y tranquilas, en las que podamos hundir nuestras manos y beber de ellas sin temor. Juntos lo podemos hacer”.