• Propicia violencia doméstica y deserción escolar
Como parte de las actividades 25N-UNAM Libre de Violencia a las Mujeres, académicas de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán alertaron sobre las consecuencias del matrimonio infantil, que representa violaciones a los derechos humanos, así como alto riesgo de violencia intrafamiliar.
La coordinadora de la licenciatura en Sociología del plantel, licenciada Mayela Tapia Mendiola, advirtió que el matrimonio infantil priva a las niñas de dicha etapa de la vida, fundamental en el desarrollo cerebral, así como de un entorno seguro, afectuoso y libre de violencia, esencial para el crecimiento fisico y cognitivo.
El matrimonio antes de la mayoría de edad representa riesgos graves para la salud y la vida, propicia la deserción escolar, embarazos adolescentes y restringe el bienestar emocional y social, pues aísla a las niñas de sus familias y amistades, restringiendo su participación en la comunidad, sostuvo Tapia Mendiola.
Además, afecta el bienestar físico y psicológico e incrementa de forma significativa la probabilidad de violencia doméstica, expuso en el Auditorio I Gerardo Lizarriturri y Olagüe la también especialista en Políticas Públicas.
De acuerdo con datos de 2023 del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), 640 millones de niñas y mujeres se casaron en la infancia, mientras que Guerrero es el estado del país con mayor número de matrimonios infantiles, pues en 2018, 9.5 por ciento de las mujeres se casaron antes de cumplir 18 años de edad.
Dicha problemática, abundó Tapia Mendiola, está asociada a la pobreza, la desigualdad de género, presión social, prácticas culturales y tradiciones, así como a la falta de acceso a la educación y la inseguridad.
En su oportunidad, la maestra Michel Monserrat Mendoza Hernández advirtió que el matrimonio infantil viola los derechos humanos de la niñez y coloca a quienes están en esa situación en alto riesgo de violencia de género.
Detalló que dicha práctica es más común en los países de Oriente Medio, con 44 por ciento de los casos a nivel mundial, y aunque en Latinoamérica solo existe el equivalente a nueve por ciento, no debemos creer que el problema es lejano.
El matrimonio infantil es una muestra del uso abusivo del poder patriarcal que anula la libertad, la autonomía y las decisiones de las mujeres desde la infancia.
Dicha situación reduce las oportunidades y aptitudes para un trabajo bien remunerado, perpetúa la pobreza e impacta negativamente en el desarrollo social y económico de las comunidades, puntualizó Mendoza Hernández.