Profesores, trabajadores y funcionarios reflexionaron acerca de la masculinidad, hombría, las emociones y los roles de género en la primera sesión del curso-taller Nadie nace macho. 10 puntos para repensar mi masculinidad, dinámica que se centró en el tema de la identidad, en específico en “lo que nos hace ser hombres”.
El curso-taller es impartido por Abner Vélez Ortiz, egresado de la licenciatura en Comunicación por la Facultad de Estudios Superiores Acatlán y coordinador del área de masculinidades en El Pozo de Vida A.C., organización que lucha contra la trata de personas y la esclavitud moderna, y Eliú Yahir Vásquez González, egresado de la licenciatura en Psicología por la Escuela Libre de Psicología, quien desarrolla e imparte cursos y talleres relacionados con la prevención del consumo de comercio sexual, machismo y sus violencias asociadas, paternidad y educación sexual.
La primera sesión fue moderada por Vásquez González, quien señaló la importancia de entablar diálogos, algo que se contrapone a visiones anteriores de la masculinidad, donde resaltaban el miedo o la imposición por medio de la violencia.
El también coordinador de educación en el área de masculinidades en El Pozo de Vida A.C, cuestionó a los asistentes: “¿Qué implicaciones tiene para ustedes ‘ser hombre’?”. En este espacio virtual los participantes compartieron sus experiencias, en las que se habló acerca de la paternidad, el matrimonio, los roles de ser proveedor o la fortaleza física.
Vásquez González alertó sobre el peligro de autoimponerse barreras para la transmisión de la información. “Si alguien se enfrasca en un estereotipo, sus niveles de crecimiento se ven obstaculizados y no puede seguir enriqueciendo su aprendizaje social”, destacó.
Asimismo, comentó que no existe una sola imagen de cómo se debe “ser hombre”, sino que se puede construir un ideal partiendo de experiencias compartidas, ya que la identidad es algo que no es estático para uno mismo y para los demás.
El experto indicó que tener cambios a nivel personal es importante, los cuales se pueden emprender desde el hogar, lugar donde podemos convertir una comunicación pasiva o agresiva, en una asertiva. De igual forma, continuó, es fundamental estar abiertos al cambio, expectantes a la información que vamos a recibir y tener la disposición de cambiar algo que sea necesario y crucial, por ejemplo, el sesgo hacia lo emocional que tienen algunos hombres o integrarse a situaciones de competencia en las que no se vele por el bienestar de los demás.
Por último, habló sobre la relevancia del autoconocimiento, así como acudir a terapia o buscar acompañamiento para ayudar a procesar esta información y que ayuden a cerrar ciclos de aprendizaje social.
Es importante destacar que las charlas se realizarán todos los jueves, del 23 de septiembre al 14 de octubre y serán dirigidas solo a académicos y administrativos, donde se abordarán temas de comunicación, interacción, comunidad y transformación.
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