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• Especialista señala que los delitos más comunes son la extorsión, el fraude y el robo de identidad, y brinda algunos consejos para evitar ser víctima de los mismos

Ante el crecimiento de la actividad en Internet durante la pandemia los delitos cibernéticos han aumentado en el país. Entre los ilícitos más comunes se encuentran la extorsión, el fraude y el robo de identidad, además, los grupos más vulnerables ante estas agresiones son las personas de más de 45 años, los adultos mayores y los niños, señaló el doctor José Antonio Álvarez León, profesor en el área de Posgrado en Derecho y política criminal de la Facultad de Estudios Superiores (FES)Acatlán.

El especialista en temas de seguridad explicó que en el caso de los menores hay una preocupación particular, pues desde antes de la aparición de la Covid-19 ya eran un foco de atención de los delincuentes en cuanto a delitos graves. Una de las amenazas a los infantes en la red son el robo de su identidad, la vinculación a redes de trata de personas, el bullying y la violencia a través del Internet, detalló.

Álvarez León indicó que las niñas son un sector especialmente vulnerable ante el delito de trata de personas, además, mencionó que en algunos casos los agresores se hacen pasar por menores de edad para enganchar a sus víctimas.

En cuanto a los adultos mayores, el delito que más se incrementó fue el fraude. Álvarez León explicó que este grupo se ha visto obligado a usar con mayor frecuencia los medios tecnológicos para realizar trámites referentes al depósito de sus pensiones, darse de alta en cuentas o trasladar su dinero de un lugar a otro. Sumado a lo anterior, las personas de la tercera edad ya eran un blanco de los delincuentes en el espacio físico, era común que cuando solicitan ayuda robaran sus datos o contraseñas.

El incremento de los delitos cibernéticos no es un hecho aislado en México, estos ilícitos también se han incrementado a nivel mundial. “En el ciberespacio no hay nacionalidad, es decir, hay tantos ciberdelincuentes nacionales como extranjeros y no hay barreras físicas que los detengan”, resaltó el experto.

El también profesor de la maestría en Política Criminal acotó que, en el caso de México, los fraudes a los bancos han estado más ligados a bandas de ciberdelincuentes extranjeros, lo cual no quiere decir que no existan a nivel nacional. “El riesgo es amplio, trasnacional y abierto”, alertó.
El especialista brindó una serie de consejos que se pueden realizar a nivel personal para protegerse ante estas amenazas. Lo primero, señaló, es no exponer información a extraños, siempre actualizar las contraseñas y no explorar ciberespacios desconocidos, “porque nos pueden vincular a redes delictivas”.

También destacó la importancia de asesorarse en el uso de medios de seguridad que las plataformas brindan a sus usuarios, asimismo, indicó que siempre hay que leer los contratos de privacidad y seguridad para conocer las responsabilidades y las medidas que deben seguir los usuarios. “Debemos estar muy atentos a lo que vemos, abrimos y leemos, porque podemos pasar no solamente a ser una víctima, sino que podemos pasar a ser parte de las redes de la delincuencia y ahí es donde vienen las extorsiones”, dijo en entrevista, y advirtió que nunca se deben abrir mensajes o links de los que no se conoce el origen.

De igual forma, enfatizó en la importancia de la denuncia: “generalmente la gente deja pasar las cosas, pero hay que denunciarlas para darles a las autoridades elementos para investigar y, de ser posible, para castigar”. Acotó que la ciudadanía puede levantar denuncias en las fiscalías, donde cuentan con páginas y números para áreas de política criminal en ciberdelitos, o bien, ante la Policía Federal, que realiza ciber patrullajes y cuenta con un área de control del delito cibernético.

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