Andrés Correa llenó de historias, amor y sentimientos el Auditorio 901 de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, al ofrecer un concierto íntimo donde estuvo acompañado de su guitarra y los estudiantes que asistieron para escuchar lo mejor de su repertorio.
El cantautor, de origen colombiano, agradeció a la FES Acatlán la invitación para exponer su historia musical a los oídos más críticos que pueden existir, como son los estudiantes, con los que tiene contacto gracias a las redes sociales.
Con Un lugar, Correa inició el recital con el que interactuó platicando de su ciudad de origen, Bogotá, y de cómo la música le ha permitido conocer países como México, donde busca hacer una carrera y llegar a más personas.
Entre las melodías que interpretó: Ana y Andrés, Duda Razonable; de corte romántico Medias Nueve, realizó una invitación a no quedarse callado cuando se quiera declarar el amor a la persona amada.
Alejado de posturas e imposturas y con la honestidad brutal decantada en unos principios claros y controvertidos frente a la industria discográfica, Andrés Correa ha recorrido a pulso el camino del cantante escritor de canciones.
Dentro de sus producciones destacan: Utópico de Cáncer (2003), Prueba y Error (2005), Socios Ociosos (2007), Correa Ramírez & Los Auténticos Water Resist (2008), Un Lugar (2010), y el más reciente Ocaso (2017), donde se puede apreciar la sencillez del rock and roll y el encanto del pop adornados con letras elaboradas bajo un cuidadoso uso del lenguaje guiando todas las historias que narra en su música.
Y como invitado, el también cantautor César González Chico, culpable de que Correa llegara a México y quien participó en la presentación con la canción, Cuatro lágrimas para Alicia.