Con la participación de casi 2 mil personas entre estudiantes, profesores, y trabajadores, se llevó a cabo en la explanada principal de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán el Concurso de Ofrendas 2018, la cual se dividió en tres categorías.

Lugares de Hechos, Decorado de puertas y Ofrendas, fueron los eventos en los que la comunidad universitaria y funcionarios participaron con gran entusiasmo en un marco de compañerismo, y en los cuales los equipos de ganadores se destacaron por su gran nivel creativo.

Entre flores de cempasúchil, incienso, adornos, disfraces, catrinas, monstruos, vampiros, diablos, hombres lobo, médicos forenses, brujitas, fotos, recuerdos y semillas, la explanada principal de la Facultad se convirtió en un gran festival de ofrendas en el que las diferentes carreras dejaban, desde temprana hora, su esfuerzo para después presumirlo ante el jurado y la gente que visitaba su trabajo.

Fue tal la respuesta que la categoría de Ofrendas se dividió en dos grupos, resultando ganador en el grupo “A” la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública, seguida por la de Comunicación y en tercer lugar la de Derecho; en el sector “B” correspondiente a las coordinaciones, el lugar de honor fue la Unidad Investigación Multidisciplinaria (UIM), seguida del programa de Derecho mientras que el tercero para Socioecónomicas.

En el concurso Lugares de Hechos, los honores correspondieron a la ofrenda El Carnicero de Satélite; detrás de ellos fueron los de El Monstruo de Ecatepec y Tenebroso Edmund K, quienes se lucieron por las escenografías.

En el Concurso de Puertas Decoradas el primer lugar correspondió al programa de Diseño, el segundo fue para Posgrado y el tercero lo compartieron Derecho y Humanidades.

Ya cuando caía la tarde y la noche comenzaba inició una procesión en el que participaron casi mil 500 personas entre estudiantes, maestros y comunidad externa que participa en el Centro Cultural Acatlán. El cortejo hizo un recorrido por toda la escuela con velas mientras como fondo se escuchaba la canción La Llorona para cerrar los actos artísticos con una pasarela de catrinas que modelaron distintos trajes típicos de Día de Muertos.