A través de los siglos y a bordo del Carro de comedias de la UNAM, los versos de Sor Juana Inés de la Cruz y Juan Ruiz de Alarcón llegaron a la explanada del Centro Cultural Acatlán (CCA).

La plaza de Juan y Juana o La empeñosa verdad de una casa sospechosa, el programa teatral más reciente del Carro de comedias, rinde homenaje a los dos grandes Juanes novohispanos con un par de sus obras: La verdad sospechosa, de Juan Ruiz de Alarcón, y Los empeños de una casa, de Sor Juana Inés de la Cruz.

Ante el público de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, el elenco conformado por Carlos Herrera, Darling Lucas, Mónica Romero, Anna Irene Guevara Meneses, Oscar Sergio Serrano y Anaid Bohor representaron Los empeños de una casa, obra de la décima musa que hizo reír al público acatleco con los enredos amorosos, los golpes bajos y los malentendidos que encierran las paredes de una casa.

Carlos está enamorado de Leonor, y ella de él, pero el astuto Don Pedro y su hermana Ana han formulado un plan para separar a la pareja. Ana es pretendida por Don Juan, pero ella quiere a Carlos, así que cuando este último huye de la justicia, Ana lo encierra en su casa, misma vivienda en la que se encuentra escondida Leonor, a quien su padre está buscando para casarla con Don Pedro.

Regresa a su alma máter

Mónica Romero, quien interpreta a Celia y a Don Rodrigo, es egresada de la licenciatura en Diseño Gráfico de la FES Acatlán. Ahora que es integrante del Carro de comedias de la UNAM se siente orgullosa de regresar a su alma máter para representar esta obra del siglo de oro español.

Mónica empezó su carrera teatral dentro del grupo de Teatro Universitario de Acatlán (TUA) y participó en El Atentado, obra acreedora al premio del Festival Internacional de Teatro Universitario (FITU). Posteriormente ingresó a la Escuela Nacional de Arte Teatral (ENAT). “Me siento muy conmovida al regresar aquí, pues esta es mi alma máter, aquí yo empecé a hacer teatro”, comentó.

Respecto al espectáculo, la universitaria comentó que se busca echar abajo la idea de que los clásicos son aburridos, lentos y difíciles de entender, ya que en esta ocasión el director Álvaro Cerviño adaptó este par de par de comedias enredosas y divertidas para que los jóvenes se acerquen a ellas.

“No se lo van a pasar nada mal”, enfatizó la actriz del Carro de comedias, que tiene presentaciones todos los sábados y domingos a las 11 horas en la fuente del Centro Cultural Universitario. Más información de las funciones en: http://www.teatro.unam.mx/